Cómo reducir el estrés en Navidad

El calendario 2012 está a punto de agotarse y eso solo puede significar una cosa: deseadas o no, las Navidades ya está aquí. Aunque nos gusten las lucecitas, la lotería, el turrón y demás parafernalia navideña, lo cierto es que estas fechas tan señaladas giran en torno a dos conceptos básicos: comida y regalos, que además, pueden sintetizarse en uno, el estrés. Te proponemos algunos consejos para que  estas fiestas no te quiten el sueño, ni siquiera aunque sea la tarde de Nochebuena y no hayas encontrado regalo aún  para tu suegra: 

  • Comer con calma para sentirse mejor En pleno apogeo de ágapes navideños, son muchos los que se ven obligados a renunciar a los rigores de una dieta equilibrada. Aunque empeñarte en llevar una dieta estricta en Navidad, puede ser frustrante y causarte un estrés innecesario, no olvides que si comes y bebes de más, te sientes fatigado y tu sueño se altera. 
  • La lista de la compra en Navidad. A la hora de llenar la nevera en estas fechas, ve a la compra con una lista hecha a conciencia. Y procura ir con el estómago lleno, para evitar poner en la cesta alimentos de relleno.
  • El menú. Si depende de tí elaborar el menú navideño, piensa qué quieres servir en la mesa y cómo, una receta sencilla y equilibrada no tiene por qué resultar menos deliciosa: compra verduras para una crema de primer plato, y  si quieres añadir una nota de sofisticación busca, por ejemplo, una receta que incluya un poco de trufa. Elige carnes magras y evita las salsas demasiado elaboradas.  Si optas por el pescado azul, prepáralo a la sal: conserva todo su sabor y es muy ligero.
  • Beber con moderación.  Aunque parezca que el alcohol nos da sueño y nos puede ayudar a dormir, en realidad provoca un sueño de mala calidad y despertares frecuentes, al alterar el ciclo del sueño. Beberse unas copas  es casi inevitable estos días, pero sí que podemos limitar el  consumo  de alcohol evitando los licores después de las comidas, sobre todo de la cena.  Mejor sustitúyelos por una infusión o una taza de té, por ejemplo verde, que además de poseer valiosas propiedades depurativas y digestivas, tiene menos cafeína.
  • Vigila el consumo de bebidas carbohidratadas de los niños  Los refrescos azucarados y con cafeína les alteran el apetito y el sueño.

Mazapán amargo

Las Navidades generan estados emocionales muy diversos, sobre todo melancolía y estrés. La Navidad puede sacar lo mejor y lo peor de nosotros mismos, por eso queremos dejaros  algunas claves para que tu ánimo no decaiga.

  • Con todos y también contigo. Te encanta reunirte con los amigos y los seres queridos que vuelven a casa en esta época del año, pero a su vez estas reuniones y el hecho de estar todo el día de compromiso en compromiso te pueden llegar a agotar, por eso es importante que acotes un tiempo para estar contigo y tus pensamientos.
  • Cuando menos puede ser más. La situación económica complicada sumada a la obligación de regalar pueden hacer mella en tu ánimo. Evita verte arrastrado por el consumismo propio de estas fechas. A la hora de hacer regalos, ten las cosas claras y adelanta las compras para no agobiarte a última hora. Puedes hacer regalos baratos y muy especiales con sorprendentes y originales envoltorios hechos por ti.

En definitiva, se trata de que mantengas a raya los excesos y de que no olvides hasta enero el hábito de las costumbres saludables. Y lo más importante: dedica tiempo a hacer lo que te gusta: lee, pasea, ve al cine,  o no hagas nada… porque, aunque sean sólo unos días,  ¡estás de vacaciones!

Felices fiestas y muy dulces sueños! 

Imagen: © Sergey Nivens – Fotolia.com

Sigue descansando