18 de Marzo: Día Mundial del Sueño

«Dormir bien es un sueño accesible». Bajo este lema se celebra el Día Mundial del Sueño alrededor de todo el mundo. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), alrededor de un 45% de la población en el mundo padece algún tipo de trastorno del sueño ya sea insomnio, conciliación tardía, entre otras.

Hoy más de ocho millones de personas en el mundo aúnan esfuerzos y deseos de dar solución a los problemas de insomnio que afectan tanto a nivel físico, psíquico como emocional. La falta de un buen descanso, de un sueño reparador tiene consecuencias directa en nuestro rendimiento diario, afectando nuestra concentración, estabilidad emocional, desarrollo físico, entre otras.

La Asociación Mundial de Medicina del Sueño (WASM) patrocinia el Día Mundial del Sueño que, como cada año, apuesta por una comunicación masiva de la importancia del dormir bien y concientizar acerca de los posibles trastornos que pueden afectar a la sociedad. A lo largo de los últimos años, los trastornos del sueño han sumado nuevos afectados en todo el mundo.

¿Padeces de insomnio? ¿Tu sueño se ve afectado por diversas causas? Existen diversos trastornos del sueño, desde transitorios hasta crónicos, sin embargo muchos de estos problemas tienen tratamiento y/o pueden prevenirse. La falta de sueño es un problema de nuestra sociedad contemporánea, un problema que requiere de investigaciones afines para poder cuidar nuestra calidad de vida y salud.

¿Cómo saber si disfrutamos de un sueño de calidad y reparador? Para determinar la calidad de nuestro dormir, es preciso analizar tres variables y/o elementos:

  1. La duración del dormir es clave a la hora de conocer la calidad de nuestro sueño. Si bien la duración depende de cada persona, se han determinado un mínimo de horas necesarias para un buen descanso teniendo en cuenta la edad.
  • Bebés de 4 a 11 meses: entre 12 a 15 horas (no superar las 18 horas)
  • Niños entre 1 a 2 años: entre 9 y 14 horas
  • Niños entre 3 a 5 años: entre 10 a 13 horas
  • Niños 6 a 13 años: entre 9 a 11 horas al día
  • Adolescentes entre 14 y 17 años: entre 8 y 10 horas
  • Jóvenes entre 18 y 25 años: entre 7 a 9 horas
  • Adultos entre 26 a 64 años: entre 7 a 9 horas
  • Mayores de 65 años: entre 7 a 8 horas
  1. La continuidad del sueño es importante para no fraccionar o interrumpir el descanso y así poder seguir los ciclos naturales del sueño.
  2. Para que el sueño sea reparador, es preciso que sea profundo. Que nuestro interruptor cerebral desconecte para que tengan lugar diversos procesos químicos internos.

En este día, se manifiesta la importancia de tener una higiene del sueño que permita velar por un dormir reparador y combatir el insomnio y otros trastornos del sueño a través de diversos consejos contra el insomnio.

Este 18 de Marzo uniros al DMS-2016 para así solidificar y expandir consejos para dormir mejor y hacer del lema «Dormir bien es un sueño accesible», una realidad.

 

Sigue descansando