¿Cómo retomar tu rutina de sueño después de vacaciones?

Te contamos cómo retomar los buenos hábitos a la vuelta de vacaciones.

Las vacaciones son sinónimo de dejar cualquier tipo de rutina de lado y disfrutar de todos los momentos que nos permiten evitar pensar en ella. Y es que de vacaciones todo cambia, los horarios, los hábitos e incluso el estado de ánimo. 

Pero, ¿qué pasa cuándo se acaban las vacaciones y hay que volver al trabajo? Una de las consecuencias que puede aparecer es el síndrome postvacacional. Consiste en un trastorno psicológico que ocurre cuando hay que volver a la rutina pero mentalmente no se está preparado, ese proceso de adaptación provoca frustración y malestar. 

Este síndrome puede presentarse en personas de cualquier rango de edad, desde los más pequeños, con la vuelta al cole, hasta los adultos con la vuelta a la rutina. 

¿Qué hay que hacer para evitarlo? Seguidamente te traemos algunos consejos para intentar reducir al máximo los efectos del síndrome postvacacional:

 

1. Dormir las horas necesarias

Para evitar el hastío y las pocas ganas de volver a la monotonía, debes dormir las horas suficientes para asegurar un buen descanso. Las recomendaciones de los profesionales oscilan entre las 8 y 10 horas en los más pequeños y las 7 y 8 horas de sueño en personas adultas.

El sentirse relajado y descansado ayudará a empezar el día con mayor energía, además de tener mejor estado de ánimo, ya que el sueño y el cansancio están estrechamente vinculados con cómo nos relacionamos con los demás.  

 

2. Relájate antes de dormir

Si te cuesta conciliar el sueño y lograr un buen descanso, es importante hacer ejercicios y actividades que nos ayuden a conseguirlo. Volver a poner en marcha el reloj biológico después de que quede modificado tras el ritmo durante las vacaciones es difícil. Así que para lograr de nuevo esta relajación, puedes crearte una nueva rutina diaria de actividades relajantes como lectura, escuchar música suave, meditar o el simple hecho de bajar la intensidad de la luz. De esta manera, estarás a un paso de que la melatonina, la hormona del sueño, empiece a trabajar.

 

3. Realiza deporte

Volver a la rutina significa volver a todo aquello que se había dejado de lado mientras se estaba de vacaciones. Y entre ello, seguramente esté el ejercicio físico. Por eso, retomar o iniciar un hábito de actividades físicas podrá ayudar ya no sólo anímicamente a sentirnos mejor con nosotros mismos, sino que ayudará a mejorar la calidad del sueño. 

¡Pero ojo con las horas! Porque realizar deporte tarde, es decir, cerca de la hora de irse a la cama puede generar adrenalina y otros elementos que pueden provocar el efecto contrario que queremos. 

 

4. Evita las siestas

Algo típico y que a pocas personas les cuesta separar de las vacaciones, son las siestas. Esos minutos de descanso y que ayudan a incrementar la actividad, rendimiento, estado de ánimo, entre otros beneficios. En caso que cueste adaptarse de nuevo al ciclo, una siesta puede empeorarlo, ya que puede entorpecer el sueño cuando llega la noche. Descubre cuánto tiempo se debe dedicar para hacer la siesta en este artículo. 

Al final, la rutina es un hábito que ya habíamos asociado a nuestro cuerpo y nuestra mente, volver a ella puede ser más o menos duro, pero tenemos que plantearnos que si podíamos antes, seguimos pudiendo ahora.  

Sigue descansando